Por sorprendente que parezca, unos ingenieros británicos están dispuestos a diseñar el primer coche del mundo capaz de desarrollar velocidades de 1.609km/h., el Bloodhound SSC, que si lo logra, superará el actual récord del mundo en más de 400km/h.
Todo el proceso para materializar este sueño tiene un coste de unos 15 millones de euros, y han estado trabajando en secreto durante los últimos 18 meses. Los cálculos sugieren que el coche podría llegar a alcanzar los 1.689km/h, suficiente para dejar atrás una bala de un revólver Magnum 357.
El equipo de ingenieros planea finalizar la construcción del coche en un año e intentará batir el récord en tres años, y será el primero en combinar un motor de aviones de un Eurofighter Typhoon con un cohete de aceleración suplementario, capaces de producir entre los dos 20.000kg de fuerza.
“Es una oportunidad de hacer algo extraordinario en términos de ingeniería y de formar parte del mejor intento del mundo de batir el récord de velocidad en tierra”, aseguraron los ingenieros.
Para hacernos mejor una idea de semejante proeza, el siguiente vídeo simula al prototipo corriendo al lado de una bala del revolver Magnum 357.